Por: Patricia Villarroel, psicóloga educativa.

Muchas veces el arte se entiende como una actividad o producto cuya finalidad es meramente estética; pero… ¿nos sirve para conocer y canalizar nuestras emociones? La respuesta es: ¡Sí!

El arte es una herramienta que nos permite expresar emociones libremente, conectándonos con nuestro yo interior. Tener la capacidad de conectar con nuestras emociones nos ayudará a sentirnos mejor.

El arte también facilita el proceso de autoconocimiento. Por medio de él podemos experimentar y conocer qué nos gusta más: pintar con lápices de color, pintura, creyones, hacer esculturas, collages, cantar, bailar ¡hay tantas opciones!

¿Te ocurre que, en ocasiones, tienes pensamientos recurrentes o emociones muy potentes y no quieres conversar sobre ellas? Si no lo expresamos de alguna manera se va acumulando y nos puede hacer daño tanto física como emocionalmente. Es posible que algunos sentimientos no sepamos identificarlos o incluso no queramos ponerlos en palabras y para ello el arte es una excelente alternativa para canalizar estas situaciones, ya que nos permite expresar naturalmente aquello que sentimos o pensamos. Es por esto que existe una corriente terapéutica basada precisamente en las expresiones artísticas. La arteterapia es una disciplina que se encuentra entre el arte y la psicología y permite precisamente promover el bienestar, el autoconocimiento, la conexión y la expresión emocional. 

Crear arte nos permite entrar en contacto con lo más profundo de nuestro ser, ayudándonos a entender qué sentimos y, por ende, a comunicarlo. Nos permite relajarnos, conectar con nuestro mundo interno y proyectarlo.

¿Esto también ocurre con los niños y niñas? ¡Si! Muchas veces los niños y niñas no saben identificar qué sienten; hacer actividades de arte les ayuda, no solo a entender cómo se sienten, sino también a expresarlo.

Es importante que acompañemos a los niños y niñas en el proceso; que tengan un espacio cómodo el cual esté disponible para cuando ellos lo quieran o necesiten. Desde muy pequeños ya son capaces de tomar un lápiz y hacer garabatos y es necesario que abramos espacios para que esto suceda.

Se recomienda acompañarlos en el proceso, sobre todo cuando son pequeños. En la medida en que van adquiriendo lenguaje podemos preguntarles: “¿Qué dibujaste?” (hacerlo siempre antes de asumir lo que nosotros como adultos creamos que puede ser), también podemos ahondar en temas más emocionales como: “¿cómo te sientes?” o “¿cómo te hace sentir eso?” y escucharlos de manera activa y validar las emociones que nos indiquen. Si no saben qué emoción están sintiendo, podemos ayudarlos a identificarlas poniéndoles nombre.  

¿Necesitamos tener conocimientos de arte para poder expresarnos por medio de él? No es necesario. La idea es poder plasmar aquello que salga de nosotros, lo que sentimos y queramos expresar. Solo necesitamos tener ganas de crear y algunos materiales de acuerdo a lo que queramos hacer.

¿Necesitamos tener conocimientos de arte para poder expresarnos por medio de él? No es necesario. La idea es poder plasmar aquello que salga de nosotros, lo que sentimos y queramos expresar. Solo necesitamos tener ganas de crear y algunos materiales de acuerdo a lo que queramos hacer.

Recomendaciones:

1. Busca un espacio apropiado; que sea un lugar en el que te sientas cómodo y se encuentre adaptado a lo que necesites hacer, que tenga buena iluminación y en el que puedas permanecer tranquilo sin interrupciones. En el caso de los niños y niñas, asegúrate que estén cómodos y que se encuentren sentados en una silla en la cual puedan apoyar los pies en algún lugar (preferiblemente el piso). Ese espacio debe estar disponible y con materiales para que pueda ser utilizado cuando se desee.
2. Evita “sobre pensar” y déjate llevar.
3. Puedes tener un cuaderno de arte, donde vayas recopilando todas las obras. Recuerda ponerles fecha. También puedes escribir en la parte de atrás y llevar un registro como si fuese un diario.

Juegos de arte para expresar emociones:

1. Cierren los ojos y hagan garabatos sobre una hoja en blanco. Posteriormente, pueden abrir sus ojos y convertir esas formas extrañas en lo que deseen. Verás cómo aflora tu inconsciente.
2. Coloquen música con la cual se identifiquen de acuerdo a su estado emocional, cierra los ojos un momento para disfrutarla y luego déjate llevar inspirándote en ella para crear algo.